27 oct 2012

E-learning: ¿el inicio del fin?

Por Luis Roldán González de las Cuevas
Formador, Consultor de empresas y Director de E-Universitas

El término E-Learning se lee y escucha cada vez más pero, como suele suceder con los términos muy usados, creemos saber de que se trata pero en el fondo no tenemos claros sus conceptos, los malinterpretamos o no le damos la dimensión que tienen.

No pretendo explicar las técnicas ni siquiera dar definiciones, lo que quisiera es plantear el e-learning (englobando el m-learning, b-learning, etc.), como el inicio de un profundo cambio y especialmente en el proceso de enseñanza-aprendizaje de los adultos.

Creo que se trata del inicio de un cambio de "chip" mental. Y digo que es un inicio, no el fin de esta historia que se está escribiendo a toda velocidad.

¿Por qué digo esto...?


Hace unos días, el participante del Programa ECEM, un consultor de empresas, cuándo hablábamos de que en el e-learning en muchos casos no había evaluaciones externas, sino auto-evaluaciones, su circuitos mentales influenciados durante muchos años por la enseñanza tradicional, no lo podían creer. La lógica pregunta inmediata no se hizo esperar... ¿Cómo saben entonces que el alumno ha aprendido?
Mi respuesta fue ¿Y por qué tenemos que saberlo nosotros? ¿Acaso lo importante no es que el mismo alumno sea el que deba saberlo?


¡Rompamos esquemas!

En nuestra educación tradicional ¿Quién es el responsable de que el alumno aprenda? Rápidamente diríamos que es el profesor, la institución que la imparte, etc. Es decir que la responsabilidad la ponemos fuera.
Desde la visión que apuntábamos anteriormente... ¿Podrías decir rotundamente que es o debería ser así?
A cada uno su responsabilidad. El profesor tendrá la suya: guiar el aprendizaje, ofrecer la información necesaria y ayudar a que esta información se transforme en conocimiento, habilidades y competencias.

El alumno por su parte tendrá la responsabilidad, ante sí mismo, de aprender.

Creo fervientemente que el profesor es solamente un facilitador o un vehículo para que el alumno aprenda. En ningún caso debería ser el personaje depositario de la verdad y por lo tanto el alumno, para aprobar, solo tiene que repetir, lo más fielmente posible, aquello que el profesor piensa o dice.
El verdadero aprendizaje se produce cuando el eje y responsable central es uno mismo.

El e-learning bien entendido provoca, como ninguna otra modalidad, la "obligación" de ser responsable y automotivado (hablamos del e-learning de calidad, no la deficiente "teleformación" que tanto abunda por Internet).

Es cierto también que quien no es capaz de automotivarse y ser responsable de sí mismo, fracasa. El fracaso al que me refiero no es necesariamente el abandono de la formación, igual recibe su diploma o certificado, sino el hecho de no haberlo aprovechado al máximo.

Para aprovechar totalmente la modalidad e-learning, el alumno debe dejar de ser un agente pasivo que recibe información para transformarse en un activo demandante de conocimientos, construyendo su propio aprendizaje, sobre sus propias necesidades.

Para pensar.
Hasta pronto



2 comentarios:

  1. Anónimo6/3/13 11:06

    Personalmente creo que es una herramienta, muy útil, pero sólo eso. Al menos por ahora. El futuro a largo plazo nadie lo sabe.

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  2. Anónimo9/4/13 02:33

    Totalmente de acuerdo, tuve la experiencia de hacer un master, con la mayor parte, por no decir toda la metodologia e learning, y se trata de otro tipo de estudio, aqui los profesores solo son inspiradores de nichos y mas y mas interrogantes ya que muestran aplicaciones de lo que se trabaja en cada tema, las aplicaciones van a la realidad donde no se retoma ninguna tematica especifica, se concluye y se expone las posibilidades de mejora y sus nuevas aplicaciones dependiendo de las necesidades del alumno. asi que es fantastico aprender a aprender con esta metodologia.

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